Amado Nervo
(1870-1919) Escritor y poeta mexicano
(1870-1919) Escritor y poeta mexicano
- No hay nada más adecuado con los fines del universo que el dolor; jamás un día en que se sufre es un día perdido.
- La ausencia es una integrante que devuelve al amor el gusto que la costumbre le hizo perder.
- El destino jamás contradice a los hombres que esperan en él, y siempre cumplen las promesas que en su nombre hacen los fuertes.
- Dios no es inteligencia infinita, no se puede haber inteligencias infinitas; Dios es una voluntad infinita.
- Por breve que sea la existencia, siempre se sobrevive a los afectos; el que parte, parte con la alforja vacía como ha llegado.
- El que ama más, más perdona.
- El hombre es un animal irónico.
- No hay fuente que pueda saciar tu ansiedad por mucho que bebas; el alma es un vaso que sólo se llena con la eternidad.
- Para conocer la altura de un hombre hay que procurar medir su egoísmo. A mayor egoísmo, mayor inferioridad.
- Las tres mayores cosas que los hombres ambicionan: el poder, las riquezas y el amor, no se conquistan con talento, sino con audacia y perseverancia.
- Vale más errar creyendo que errar dudando
- Ayuda a los dioses a que te ayuden.
- Amar: eso es todo; querer: todo es eso. Los mundos brotaron al eco de un beso.
- La mayor parte de los fracasos vienen por querer adelantarlos al éxito.
- La fortuna es como la policía: siempre llega tarde.
- Sé fuerte para tener derecho a ser pacífico.
- La verdadera grandeza es la que no necesita de la humillación de los demás.
- Derrotado siempre, abatido nunca / yo, ensueños rotos, labro un ideal.
- Si hay algo que duele más que la ingratitud, es la incomprensión.
- Haz el bien a la mayor cantidad de gente posible, pero trata a la menor cantidad posible.
- Si nunca has tenido un gran éxito, no sabes lo que vale; el éxito es la piedra de toque de los caracteres.
- La caridad de los ricos no es más que la forma del remordimiento.
- Puesto que no estoy contigo, yo sólo quiero estar solo.
- Ama como puedas, ama a quien puedas, ama todo lo que puedas… pero ama siempre.
- Si no te quieren como tú quieres que te quieran, ¿qué importa que te quieran?
- … La lluvia cae como algo que se deshoja.
- La noche es una rosa, mística rosa negra, salpicada de pólenes de plata: las estrellas.
- Ella se puso roja, ¿no es esto de rigor? Y… naturalmente, se volvió más bella.
- El espíritu del cristianismo es un espíritu de sacrificio.
- Yo defino el temor: una autosugestión más o menos voluntaria de inferioridad.
- La pasión es una fuerza cósmica, como la gravitación.
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